sábado, 27 de octubre de 2012

Guatemala: la implantación autoritaria y violenta del neoliberalismo

En Centroamérica, Guatemala es un caso ejemplificante. En ese país, la profundización del modelo neoliberal ha entrado en una fase de cruenta violencia que ya lleva varios muertos a cuestas solo en los últimos meses.

Rafael Cuevas Molina/Presidente AUNA-Costa Rica

El ejércicto y la violencia del modelo neoliberal
en Guatemala. Una representación tras la reciente
masacre de Totonicapán  (Fuente: CPR urbana)
Chile fue la primera experiencia latinoamericana de imposición del Consenso de Washington luego del golpe de Estado pinochetista en los ahora lejanos años 70. El carácter primigenio de esta primera experiencia llevó a algunos a especular sobre la posibilidad de si solamente a partir de un régimen autoritario como el chileno era posible hacer las reformas draconianas que implicaba.

Las experiencias recientes en Europa nos muestran cómo el neoliberalismo tiene un fuerte componente de este tipo. En términos generales, hay un “endurecimiento” del Estado que lleva a restringir espacios a la democracia y a privilegiar la salida represiva.

El neoliberalismo asfixia a América Central

El carácter destructivo del modelo neoliberal en el Istmo centroamericano se expresa con mayor intensidad en dos dimensione del proceso de acumulación capitalista: una es la de la explotación de los recursos naturales y la biodiversidad (una de las mayores y más ricas del mundo); la otra es la de la acumulación financiera, donde los banqueros privados se perfilan como los grandes ganadores.

Andrés Mora Ramírez / AUNA-Costa Rica

“Cuando sonó la trompeta, estuvo /todo preparado en la tierra /
y Jehová repartió el mundo / a Coca-Cola Inc., Anaconda, /
Ford Motors, y otras entidades: / la Compañía Frutera Inc. /
se reservó lo más jugoso,  / la costa central de mi tierra, /
la dulce cintura de América”. Pablo Neruda (Canto general)

Panamá: la represión policial ordenada por el presidente
Martinelli expresa la naturaleza del modelo neoliberal.
Como es sabido, a partir del golpe de Estado en Honduras, perpetrado en junio de 2009, América Central experimenta un recrudecimiento del giro político a la derecha. La detención y expulsión del país –desde una base militar del ejército estadounidense- del presidente constitucional Manuel Zelaya, con idénticos procedimientos a los utilizados por Estados Unidos y Francia en Haití para la expatriación del presidente Jean Bertrand Aristide en 2004, señala un punto de quiebre en nuestro fugaz verano democrático: el de la llegada al poder de dos Frentes de Liberación Nacional en Nicaragua (2007) y El Salvador (2009), el del triunfo de la socialdemocracia en Guatemala (en 2008), y el de los procesos que avanzaban Zelaya y los movimientos sociales hondureños.

Panamá: Colón en “estado de sitio”

El país entero se ha solidarizado con el pueblo de Colón, las provincias, las comarcas, los municipios, los trabajadores del agro, los obreros de la ampliación del Canal de Panamá, estudiantes e, incluso, sectores empresariales. A la vez, responsabilizan nuevamente al presidente Martinelli, por los desmanes cometidos por las fuerzas policíacas.

Marco A. Gandásegui, h. / ALAI

"Colón no se vende": el grito de lucha en Panamá.
“A llorar al cementerio…” fue el grito de batalla del presidente de la Asamblea de Diputados después de aprobar la Ley 72 que privatiza las tierras de la Zona Libre de Colón (ZLC). Fue un anticipo de la muerte del niño José Patricio Vega Betancourt, de 9 años de edad, y del trabajador Andreve Dixon, de origen kuna. El niño fue atravesado por una bala y el trabajador kuna recibió un disparo en la frente en medio de la represión desatada contra el pueblo colonense por parte de la Policía Nacional y del Servicio Nacional de Fronteras (SENAFRONT). 

Este cuerpo militarizado es financiado, armado y entrenado por el Comando Sur de EEUU que ha identificado como el enemigo número uno de sus intereses a “los campesinos e indígenas de Panamá”. La militarización acelerada del país puede explicar el reciente nombramiento de un comisionado (coronel) de la Policía como vice-ministro de Seguridad.

Guatemala: Ocho muertos no son para tanto



Los enfrentamientos de Totonicapán son el penúltimo ejemplo de un rosario de incidentes de acoso a los campesinos y a sus líderes, a menudo relacionados con el fenómeno del acaparamiento de tierras.

Gonzalo Fanjul / EL PAIS
(España)

Agradecemos el envío de este texto a nuestro colaborador el Dr. Ricardo Melgar Bao, del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) de México.

Funeral de los indígenas asesinados en Totonicapán.
El pasado 4 de Octubre un grupo de entre 15.000 y 20.000 campesinos indígenas guatemaltecos de la región conocida como los “48 Cantones de Totonicapán” tomaron cinco puntos de la carretera Interamericana, cortando el tráfico en una protesta masiva contra el Gobierno de Otto Pérez Molina. En uno de esos puntos –conocido como la Cumbre de Alaska- el ejército decidió ignorar el compromiso del Gobierno de retirar las fuerzas de seguridad para evitar enfrentamientos violentos (que sí cumplió la policía, de acuerdo al informe de la ONU) y cargó contra los manifestantes lanzando gases lacrimógenos y disparando fuego real. En la refriega murieron ocho campesinos y al menos otras 46 personas resultaron heridas, entre ellas 13 miembros de las fuerzas de seguridad. Tras un primer intento de desviar la atención hacia un supuesto guardia de seguridad que disparó contra los manifestantes, el Gobierno ha acabado reconociendo la responsabilidad de las fuerzas armadas en la matanza y ya se han realizado las primeras detenciones.

Hugo: el delito múltiple de ser indígena en México.

El caso de Sánchez Ramírez es uno de miles en un México donde no existen contrapesos en el marco de la guerra contra el narcotráfico, en un país donde la tortura y la incriminación son los principales actores de un sistema que, genérica y sostenidamente, transgrede y violenta los derechos fundamentales.

Abraham Trillo* / Especial para Con Nuestra América
Desde Morelia, México

 la justicia es como la serpiente, que sólo muerde a los que andan descalzos
Monseñor Óscar Arnulfo Romero

Hugo Sánchez, indígena mazahua, da declaraciones
a la prensa tras recuperar su libertad.
En el 2009, el Juez Sexto de Primera Instancia de Toluca (Estado de México), condenó a Hugo Sánchez Ramírez, indígena Mazahua, a 37 años de prisión por el delito de secuestro a dos adolescentes, y 5 años por el delito de portación de arma de fuego, sentencia confirmada en el año 2011 por el Segundo Tribunal Colegiado en Materia Penal del Segundo Circuito. El joven indígena fue detenido en julio de 2007 por tener “una actitud sospechosa”, de acuerdo a las declaraciones de la policía municipal, misma que, sobre la ley, nunca lo presentó ante el Ministerio Público.

El cinismo del sistema penitenciario no tiene límites. A pesar del pronunciamiento de 5 Ministros de la Suprema Corte que le permitió recuperar su libertad, y de exhibir a las autoridades del estado de México como fabricantes de culpables, Hugo fue nuevamente victimizado, toda vez que se le mantuvo retenido ilegalmente en el penal Santiaguito, en Almoloya de Juárez, durante 150 horas aproximadamente, con la clara intensión de que el indígena desistiera del amparo que continúa en proceso en la Suprema Corte de Justicia de la Nación, en relación al delito de portación de arma de fuego, y así asumiera su responsabilidad en el otro delito que tampoco cometió.

A 50 años de la crisis de Octubre (parte I)

El triunfo de la Revolución Cubana el 1° de enero de 1959 irrumpió como un vendaval en el planeta, en particular en América Latina y el Caribe. Se vivía una etapa caracterizada por un sistema internacional bipolar rígido que se trastornaba tan solo ante la posibilidad de cualquier vaivén que pusiera en entredicho los severos mecanismos de control tácito que cada polo de poder, Estados Unidos y la Unión Soviética habían establecido como forma de “ordenamiento” del sistema jurídico internacional.

Sergio Rodríguez Gelfenstein / Especial para Con Nuestra América
Desde Caracas, Venezuela

La crisis de octubre de 1962 mantuvo
en vilo a América Latina y el mundo.
Estados Unidos entendió con mucha rapidez la profundidad y alcance de la Revolución Cubana fue. Casi desde el mismo 1° de enero de 1959 comenzaron sus acciones agresivas en contra de la Isla. Las mismas se manifestaron en el terreno  del sabotaje económico y financiero y en el militar a través de agresiones directas y el apoyo a acciones terroristas que afectaban a ciudadanos y bienes cubanos.

El 4 de marzo de 1960, Estados Unidos estuvo tras la voladura del barco francés La Coubre, en el puerto de La Habana. Este criminal atentado ocasionó 101 muertos, entre ellos varios franceses, mas de 200 heridos y numerosos desaparecidos. Al año siguiente se intensificaron los actos terroristas, que incluyeron la quema de cañaverales durante la zafra azucarera, el sabotaje a fábricas y ataques de diversos tipos contra la economía. En estas acciones  fueron asesinados 281 ciudadanos, en su mayoría campesinos, mujeres y niños, así como milicianos y jóvenes voluntarios que participaban en la Campaña de Alfabetización.

Las FARC y la paz en Colombia

Pese a la balandronada gubernamental de que las FARC han accedido  a negociar porque ya están derrotadas, cualquier analista de medio pelo puede avizorar que lo que está sucediendo es que la lógica del “second best choice” ha empezado a privar en el gobierno de Santos.

Carlos Figueroa Ibarra / Especial para Con Nuestra América
Desde Puebla, México

Hace ya  unos años, durante mi estancia académica en la Universidad de Stanford, aprendí que en la ciencia política estadounidense  que analizaba conflictos, existía la expresión “the best second choice” (“la segunda mejor opción”).  La primera mejor opción en un conflicto, sobre todo si se trata de una guerra, es aniquilar al enemigo para que su rendición sea incondicional. La segunda mejor opción, en la medida en que ninguno de los bandos  resulta derrotado, es la negociación  y los acuerdos de paz. Exactamente lo que sucedió en Nicaragua, El Salvador y Guatemala después de los sangrientos años ochenta del siglo pasado. Esto es lo que parece estar ocurriendo ahora en Colombia. Obviamente las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) tras 48 años de guerra de guerrillas, no pudo derrotar al gobierno colombiano fuera de signo liberal o conservador,  ni tampoco impulsar una revolución por la vía violenta. Tampoco el Estado colombiano, a través de sus distintos gobiernos, pudo derrotar a las FARC.  Después de un intento de solución negociada durante el gobierno de Andrés Pastrana (1998-2002) que tuvo como epicentro una “zona de distensión” en la región del río Caguán, su sucesor Álvaro Uribe (2002-2010),  intentó resolver el conflicto mediante la aniquilación de las FARC.

Colombia: “Que no se repita la historia de negociación seguida de represión contra el pueblo”

Marylén Serna Salinas, dirigente campesina del Cajibío (Cauca, sur-oeste colombiano), una de las responsables a nivel nacional del Congreso de los Pueblos, espacio que reúne a numerosas iniciativas, organizaciones y plataformas sociales, analizó el proceso de negociación de la paz en Colombia, durante una reciente visita europea. Para Serna, el Congreso de los Pueblos apuesta, junto con otros actores sociales, a participar activamente en la construcción “de una paz con justicia en Colombia”.

Sergio Ferrari / Especial para Con Nuestra América

Marylén Serna, dirigente campesina del
Consejo de los Pueblos de Colombia. 
P: ¿Cómo percibe el movimiento social la actual coyuntura de diálogo para la paz?

R: Con algo de sorpresa, al principio, con una gran expectativa, ahora. Estamos generando las condiciones para una participación efectiva en el proceso de paz. Queremos afianzar un real movimiento por la paz que sea incluyente, en el que participen todos aquellos que han venido contribuyendo desde años y desde distintos escenarios y regiones a ese objetivo. Proponemos, también, consensuar y construir entre todos lo que denominamos como *agenda social*, es decir las propuestas y temáticas concretas, que expresan las reivindicaciones de los diferentes sectores sociales. Somos conscientes que es esencial definir la forma organizativa de la participación del movimiento social en el proceso de negociación. Porque no vamos a poder ser miles los que nos sentemos en una mesa. Nuestro dilema es cómo ser participativos, diversos, incluyentes y al mismo tiempo, asegurar aportes reales, concretos, sistematizados, consensuados, al proceso en marcha.

Argentina en el medio… oriente

El problema del mundo no es la falta de espacio, ni la pugna interreligiosa, ni alguna que otra fantasía encubridora de lo real, sino la desigual distribución de la riqueza en el marco del capitalismo depredador, explotador y opresor, que necesita, como el vampiro la sangre, concitar el odio y la guerra entre los pueblos para seguir engordando su cuerpo decrépito e inservible.

Jorge Ubertalli / Especial para Con Nuestra América
Desde Buenos Aires, Argentina

La fragata argentina Libertad, detenida en Ghana
por presiones internacionales de los "fondos buitres".
Distintos conflictos, abiertos y encubiertos, signan la política internacional de nuestro país. La posesión forzada de Malvinas por Gran Bretaña, la oposición abierta y encubierta de los EE.UU. y sus aliados a la relación de Argentina con la Venezuela Bolivariana, las contradicciones de nuestro país y otros de la región con EE.UU. en cuanto al tema Defensa, que se plasmaron en la última reunión de ministros de Defensa celebrada en Punta del Este a principios de mes, son apenas la punta de un iceberg volcánico que, ocultado por probos y réprobos, bulle en su profundidad, atizado por el conflicto Israel-Irán y su proyección en el subcontinente.

La pugna entre estos dos países por influir en Nuestra América, y en nuestro país en particular, se halla contenida en una agenda real y mediática que incluye a periodistas, dirigentes sociales, uniformados levantiscos, altos jefes de las Fuerzas Armadas y de Seguridad, funcionarios de alto nivel y, fundamentalmente, “fondos buitres”, titulados así por un empresario norteamericano vinculado al lobbie sionista ultraconservador, que han logrado influir en un país africano para que éste interdicte a la fragata “Libertad”, buque escuela de la Armada, hoy anclada forzosamente en el puerto de Tema, de Ghana.

Argentina: Roberto Vicente Carretero, el rector de la arboleda

Carretero fue un sembrador y su cosecha será abundante, porque su semilla permanece, no pudo, ni podrá, aniquilarla el odio, ni el olvido, puesto que se poliniza esparcida en el viento, y caerá, solamente, donde haya terreno fértil para convertir en bosque al desierto.

Martín Omar Aveiro / Especial para Con Nuestra América
Desde Mendoza, Argentina

Al centro, en el micrófono, el rector  de
la UNCuyo Roberto Vicente Carretero.
La hermosa ciudad de Mendoza, en el oeste argentino, se caracteriza entre otras cosas por sus abundantes arboledas, bañadas por acequias de aguas cristalinas. Al pie de la cordillera de los Andes sorprende por el vergel producto de la mano del hombre en aquello que, alguna vez, fue un desierto. Moreras, Fresnos, Plátanos, Acacias, Paraísos, Acer, son algunas de las variedades arbóreas que refrescan y aroman el agreste clima mendocino. Nadie, que haya caminado por sus anchas veredas, puede olvidar, en una tarde de primavera, la fragancia de sus verdes callecitas o, en otoño, el festival de amarillos, marrones y rojizos de sus frondosas plazas.

Roberto Vicente Carretero, no era de aquí, había nacido en Carlos Casares de la Provincia de Buenos Aires, el 25 de febrero de 1916 y se recibió de Ingeniero Agrónomo en 1939, en la Universidad de Buenos Aires. Sin embargo, una pasión lo unió a Mendoza para siempre, los majestuosos follajes. Decía en el 25° aniversario de la Asociación Forestal Argentina, que el mismo contribuyó a fundar el 15 de abril de 1946, acerca de aquellos vegetales perennes: “Vivos o muertos, los árboles nos acompañan por doquier en el curso de nuestra vida, como si fueran una dilatación de nuestro cuerpo o el ángel tutelar de nuestro espíritu […]”. 

Cultura de la naturaleza. De la historia ambiental como historia.

Todo nos advierte, ya, que hemos ingresado a aquel futuro en que la ciencia de la naturaleza va siendo finalmente la ciencia del hombre y se halla cada vez más subsumida bajo esta.

Guillermo Castro Herrara / Especial para Con Nuestra América
Desde Ciudad Panamá

En síntesis, la revolución del ADN […] brinda un marco racional para la elaboración de una historia del mundo. Una historia que considere al planeta en toda su complejidad como unidad de los estudios históricos, y no un entorno particular o una región determinada. En otras palabras: la historia es la continuación de la evolución biológica del homo sapiens por otros medios.
Eric Hobsbawn. El desafío de la razón: Manifiesto para la renovación de la historia

La discusión sobre el vínculo entre las Humanidades,  las ciencias sociales y la ciencias naturales, que subyace a todo el proceso de formación de la historia ambiental como campo del saber, es más antigua de la que parece. Ella es parte de un debate iniciado mucho antes –el Génesis es un ejemplo– sobre el lugar y a función de la especie humana en la evolución del infinito sistema de relaciones al que llamamos la naturaleza, nuestro entorno vital. Lo que sigue es un ejemplo del estado de esa discusión hacia 1844, en París, por parte de un joven intelectual que, a sus 26 años, procuraba ajustar cuentas con la formación que había recibido, para encontrar su propio camino:

Caso Malala: ¡basta ya de manoseo!

En el manejo de la geopolítica sabemos que todo es posible, lo más bajo y abyecto también. O más aún: eso precisamente es lo que la define. La manipulación mediática de la gran masa planetaria es, hoy por hoy, un elemento imprescindible en esas estrategias (“guerra de cuarta generación” la llaman los estrategas del Pentágono).

Marcelo Colussi / Especial para Con Nuestra América
Desde Ciudad de Guatemala

El pasado 9 de octubre, en el valle del río Swat, en el noroeste de Pakistán, un grupo de fundamentalistas talibanes, varones, disparó en la cabeza a la joven Malala Yousafzai, de 14 años de edad, con la intención de matarla. El motivo: la negativa de la joven a dejar de asistir a la escuela pese a la prohibición establecida por los talibanes en ese sentido desde el 2009 en la región que manejan entre Pakistán y Afganistán.

Providencialmente Malala no murió, pero quedó malherida. Ya anteriormente se había constituido en blanco de ataque del grupo talibán por defender sus derechos como mujer, motivo por el que el gobierno pakistaní la había condecorado con el primer Premio Nacional de la Paz, habiendo recibido igualmente varios galardones infantiles internacionales. Ahora salvó su vida; la bala no llegó a ningún órgano vital, destruyéndole por el contrario la mandíbula y alojándose en el cuello, dejándola temporalmente sin habla. Pero los talibanes dijeron que volverán a intentar asesinarla. Malala fue sacada de su país y trasladada a Gran Bretaña, donde en estos momentos se recupera en un hospital de Birminghan luego de complicadas intervenciones médicas.

Estados Unidos: Plutocracia democrática

Toda la retórica sobre la “democracia” y de que existe “una opción” que inunda al país a menos de tres semanas de la elección se contrapone con la realidad de que por ahora, esta es una democracia para, por y de los más ricos. O sea, plutocracia democrática.

David Brooks  / Corresponsal de LA JORNADA en Estados Unidos

Los candidatos presidenteciales Obama y Romney.
En el universo exclusivo de los más ricos aquí, la democracia es un concepto muy bonito si se define como uno en donde su bienestar es el bienestar de Estados Unidos, y están dispuestos pagar millones para asegurar que esa definición sea la que triunfe en las elecciones.

Las campañas electorales de los candidatos de los dos partidos nacionales –o sea el proceso necesario para que esto obtenga el sello de “democracia”– son en gran parte financiadas por los más ricos, asegurando que gane quien gane, ellos ganan.

sábado, 20 de octubre de 2012

Elecciones en Estados Unidos: ¿me quiere, no me quiere?

América Latina cuenta poco en la aritmética imperial de las elecciones. La campaña presidencial norteamericana se pierde por otros trillos, es decir, por aquellos que interesan a una potencia que pierde bríos y se encuentra enredada en los mecates de la crisis económica.

Rafael Cuevas Molina/Presidente AUNA-Costa Rica

El poder y el markenting: los candidatos Romney y Obama ríen para las cámaras,
 junto al arzobispo de New York, en un evento de caridad de la iglesia católica.
Como cada vez que van a haber elecciones en Estados Unidos, en América Latina se especula sobre el lugar que ocupa nuestro subcontinente en las propuestas de los candidatos norteamericanos. Algunos, los más preocupados, deshojan margaritas: ¿me quiere, no me quiere? Otros, tal vez porque tienen poco qué hacer, llegan a contar las veces que se nos menciona en los discursos, en los documentos y hasta en los chistes que, necesariamente, tienen que contar los candidatos en los mítines para caer simpáticos.

El hecho es que, luego de especulaciones, conteos y cálculos, se llega a las mismas conclusiones: América Latina cuenta poco en la aritmética imperial, y quienes son mencionados, de vez en cuando, son aquellos que han sido catalogados como enemigos o miembros del eje del mal, versión de la Casa Blanca de quienes, en los set de Hollywood, son los malos de la película.

Obama, Romney y el lugar de los Estados Unidos en el mundo

Las diferencias entre los dos candidatos se refieren a los medios, no a los fines de la política exterior.


Luis Fernando Ayerbe* /  Especial para Con Nuestra América
Desde Sao Paulo, Brasil

Romney y Obama: diferencias en los métodos,
pero no en los objetivos de política exterior.
En la política exterior, las diferencias entre Barack Obama y Mitt Romney se refieren a los medios, no a los fines, sintetizados en el repetido eslogan de “promover el imprescindible y necesario liderazgo de los Estados Unidos”. Para los críticos de la postura internacional del país, aunque ambos sean parte del núcleo del establishment, Obama es un blanco móvil, más difícil de encuadrar y acertar; Romney, en cambio, es un blanco fijo, como Bush, adversario ideal.

En la actual contienda electoral, siguiendo la línea adoptada desde 2009, los republicanos acusan a Barack Obama de promover, por opción o inepcia, la pérdida de la supremacía conquistada por los Estados Unidos después de la victoria de la Guerra Fría.

El triunfo en Venezuela y las luchas que vienen

Triunfó la Revolución Bolivariana una vez más. Y con ella, toda América Latina. Pero ya despuntan en el horizonte inmediato nuevas luchas, batallas no menos intensas y decisivas, con elecciones legislativas y presidenciales en Venezuela, Argentina, Ecuador, Bolivia, Paraguay y El Salvador, entre 2012 y 2014. Allí se pondrá a prueba la unidad de nuestra América.

Andrés Mora Ramírez / AUNA-Costa Rica

El triunfo de Chávez en Venezuela alienta los procesos de cambio en nuestra América.
La reciente elección presidencial celebrada en Venezuela principios de este mes octubre ha sido una lección para América Latina y el mundo, especialmente para aquellos sectores de la derecha global y la criolla–la imperialista y la devota de la sumisión- y los medios de comunicación hegemónicos que, aunque sea para mantener las buenas costumbres que exige la diplomacia, o para ocultar el deshonor de sus campañas del odio y la infamia, han tenido que reconocer la limpieza, la solidez institucional y el carácter democrático del proceso electoral.

Con resultados inapelables y una altísima participación ciudadana (del 80% de los electores inscritos en el padrón de votantes), mucho mayor que en la última elección de los Estados Unidos, se entiende por qué el expresidente de ese país, Jimmy Carter, calificó al sistema electoral venezolano como el mejor del mundo. Y esto, en una región como la nuestra, tan proclive a la inestabilidad institucional, a la apatía y al abstencionismo, especialmente en los últimos 30 años de dominio neoliberal, no es poca cosa. 

Chávez después de la euforia

Tienen pues Hugo Chávez y las fuerzas bolivarianas una enorme tarea: desterrar el triunfalismo y asumir la autocrítica. Como dijera Marx en su “18 Brumario”: las revoluciones se critican constantemente a sí mismas, se interrumpen continuamente en su propia marcha, vuelven sobre lo que parecía terminado y comienzan de nuevo.

Carlos Figueroa Ibarra / Especial para Con Nuestra América
Desde Puebla, México

Han pasado  dos semanas después de que en Venezuela la derecha  ha sido derrotada electoralmente una vez más. Desde 1998, Hugo Chávez ha triunfado en 13 de 14 procesos electorales de distinta índole. Ha ganado 4 elecciones presidenciales y un referéndum revocatorio.  Su proyecto solamente fue derrotado en 2007 cuando la consulta sobre la reforma constitucional. Además, el chavismo derrotó el golpe de estado de abril de 2002 y luego el paro petrolero de diciembre de ese mismo año. Otros tres intentos golpistas también resultaron fallidos. En estas elecciones presidenciales de octubre de 2012, Hugo Chávez ganó con el 55% de los votos y derrotó a  la derecha en 22 de los 24 estados, incluidos el Distrito Capital y bastiones derechistas como son los estados de Zulia, Carabobo, Nueva Esparta y Miranda, además de Lara, Monagas y Amazonas en las que gobernadores otrora oficialistas se pasaron a la oposición. La victoria política del chavismo fue en cierto modo también una victoria ideológica. El candidato de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), Henrique Capriles, tuvo que correrse hacia el centro y hasta asumir una imagen de izquierdista moderado en un intento de disputarle a Chávez su electorado.

A 200 años de la Constitución liberal de España

Con motivo del Bicentenario de la Constitución de Cádiz, se ha convocado para el 16 y 17 de noviembre en esa ciudad andaluza a la XXII Reunión Cumbre de Jefes de Estado y Gobierno de Iberoamérica.  Sería este un buen momento para rendir homenaje al general Riego y a los liberales españoles que con su acción y el sacrificio de sus propias vidas jugaron un papel decisivo en la lucha por la Independencia de nuestras naciones.

Sergio Rodríguez Gelfenstein / Especial para Con Nuestra América
Desde Caracas, Venezuela

España es un país de origen multicultural establecido en una región  en la que a través de la historia se ubicaron diversos pueblos provenientes del norte de África y el oeste de Europa. Sufrieron diversas ocupaciones hasta que los romanos se asentaron en su territorio e impusieron por primera vez una autoridad política única hacia el siglo I a.C.

La península ibérica fue ocupada por los visigodos entre los siglo V y mediados del VIII d.C. Posteriormente los árabes invadieron el territorio y se mantuvieron por 7 siglos. Los descendientes de los visigodos concentrados en el norte de la península fueron organizando reinos (Castilla, Aragón, Cataluña, Navarra y León entre otros) y comenzaron el proceso de unificación por oposición a los árabes.

La homosexualidad como enfermedad: ¡seguimos en el Medioevo!

Luchar por un mundo menos primitivo, más solidario e incluyente, implica también luchar contra los prejuicios.

Marcelo Colussi / Especial para Con Nuestra América
Desde Ciudad de Guatemala

“No es que Dios no quiere a los homosexuales; Dios no quiere el pecado”.
Declaraciones de un “terapeuta de homosexuales”

Hace ya casi un cuarto de siglo, el 17 de mayo de 1990, la Organización Mundial de la Salud -OMS- quitó de la Clasificación Estadística Internacional de Enfermedades la homosexualidad como una entidad gnosográfica, como una patología. Es por eso que esa fecha, el 17 de mayo, ha quedado instaurada como “Día Mundial contra la homofobia, la lesbofobia y la transfobia”.

Podríamos estar tentados de pensar que la tolerancia sexual está instalándose. Pero no necesariamente es así. La homofobia sigue recorriendo nuestra sociedad planetaria. Con diferencias, con matices a veces muy marcados, pero que a la larga no difieren en lo sustancial, la discriminación a partir de la identidad sexual sigue siendo algo común, cotidiano, más allá de avances significativos que al respecto se puedan haber conseguido estos últimos años.

Honduras: “Bajo Aguán: Grito por la tierra” (Video)

El Bajo Aguán, en Honduras, sufre desde hace años un conflicto provocado por la falta de acceso del campesinado a la tierra y la expansión de las grandes plantaciones de palma africana, que han visto cómo crecía su demanda internacional. Tras el golpe de Estado de 2009 contra el presidente Manuel Zelaya el conflicto se ha agudizado, y la represión sobre el movimiento campesino se ha extendido en un estado de total impunidad.

“Bajo Aguán: Grito por la tierra”, de Ernest Cañada, es un reportaje realizado por ALBA SUD y la Rel-UITA en colaboración con Movimiento Mundial de Bosques Tropicales (WRM), FIAN Internacional, Coordinadora de Organizaciones Populares del Aguán (COPA), Radio Universidad (UCA Nicaragua) y el Comité de Empresa de Serveis Funeraris de Barcelona.

Panamá: El Fondo de Ahorros de los “Empresarios”

Los mártires del 9 de enero de 1964, quienes simbolizan las luchas por la recuperación de la soberanía y del Canal de Panamá, han sido muy mal servidos. Precisamente, quienes se opusieron a las luchas populares para la recuperación de la posición geográfica usurpada por EE.UU, ahora estarán sentados en la directiva del FAP administrando los recursos futuros de un pueblo que luchó y sacrificó 23 jóvenes en esas luctuosas jornadas.

Marco A. Gandásegui, h. / ALAI

En medio del griterío provocado por los políticos de las grandes empresas transnacionales y sus sucursales panameñas, se creó la nueva figura legal denominada Fondo de Ahorros de Panamá (FAP). En la Asamblea de Diputados los partidos políticos, con el Partido Cambio Democrático del presidente de la República a la cabeza, aprueban leyes impopulares destinadas a arrancarle al pueblo los pocos recursos que le quedan. Los partidos de la oposición, sin provocar sorpresas, no hacen esfuerzo alguno para detener el saqueo de comunidades, pueblos y del mismo país.

Todo parece indicar que cada vez es menos lo que las empresas monopólicas pueden arrancarle –legal e ilegalmente– al pueblo panameño. La “guerra contra las drogas” ha servido para que esta clase y sus partidos políticos se rearmen nuevamente hasta los dientes, reprimiendo a los pueblos indígenas, campesinos y comunidades pesqueras.

Pese a Estados Unidos, Cuba cambia

Las nuevas medidas migratorias adoptadas por La Habana responden a iguales deseos compartidos por la población de la isla. Habían sido anunciadas en varias ocasiones por el presidente Raúl Castro como parte del programa de “actualización” del socialismo cubano, que marcha sin prisa pero sin pausa. Deliran los que hablan de fuga y derrumbe.

Ángel Guerra Cabrera / La Pupila Insomne

Las relaciones entre EE.UU y Cuba: una historia de
desencuentros marcados por el imperialismo.
Cuba aplicará una trascendente reforma migratoria a partir del 14 de enero del año entrante que suprime engorrosos trámites para viajar y propicia un mayor reencuentro de los cubanos. El hecho es muy positivo y responde a una aspiración mayoritaria de la nación. Pero apreciar su verdadero alcance exige considerar aunque sea someramente sus antecedentes y contexto histórico.

El análisis de este y de cualquier asunto de naturaleza política en Cuba no puede abstraerse de la política hostil y agresiva contra la revolución mantenida inflexiblemente por la vecina superpotencia desde los tiempos de la guerra de liberación. Esto es particularmente pertinente cuando se trata de la emigración pues Estados Unidos la ha utilizado hasta la fecha como un arma de desestabilización de la isla.

Cuba: Mi crisis de octubre

Era demasiada la humillación a que las dos superpotencias sometieron a Cuba -lo que sin duda nos sirvió para saber el verdadero calibre de nuestras amistades y lo solos que estábamos frente al poder destructor de nuestros enemigos-.

Silvio Rodríguez / Segunda Cita

“He vivido días magníficos y sentí a tu lado el orgullo de pertenecer a nuestro pueblo en los días luminosos y tristes de la Crisis del Caribe”.                                 Carta de despedida del Che a Fidel, 1965.

Silvio en 1962.
(Fotografía de Virgilio Martínez)
En octubre de 1962 ya yo llevaba más de un año en las milicias. Me había inscrito en mi escuela secundaria, en 1961, cuando la invasión por Playa Girón. Por eso pasé aquella famosa crisis acuartelado en mi centro de trabajo, haciendo guardias de madrugada con un máuser.

El semanario Mella y sus talleres quedaban en la calle Desagüe 108 y 110. Durante el día trabajábamos como el órgano de prensa que éramos. A eso de las 5 de la tarde íbamos a bañarnos y a comer a nuestras casas. A las 8 de la noche nos íbamos caminando hasta el Pontón, frente al parque de la antigua Escuela Normal de La Habana, a hacer preparación combativa. Después regresábamos al Mella, a dormir.

Nuestras prácticas militares eran bastante aburridas y a casi nadie le gustaban. Nos habían prometido clases de tiro, que nunca aparecieron, y todo consistía en marchar y arrastrarnos por el fango del centro deportivo, mientras los tenientes de milicia nos gritaban que bajáramos cabeza y talones, y nosotros tratábamos de imaginar que librábamos algún heroico combate.

Las mañas del Pentágono

Los países de la región aún no están en condiciones para poner en pie un sistema de defensa colectivo y autónomo, pero avanzan en la desarticulación de las iniciativas del Pentágono.

Raúl Zibechi / LA JORNADA

La concentración de poder se ha convertido en la tendencia global más importante en los recientes 50 o 100 años. En este proceso, el poder militar juega un papel decisivo, aunque el pensamiento crítico se ha concentrado, quizá excesivamente, en el poder económico, sin visualizar que es el poder duro el que asegura la continuidad de la acumulación de capital.

Hace siglo y medio Karl Marx destacó en una carta a Federico Engels (25 de septiembre de 1857) la importancia del ejército en el desarrollo económico, en las innovaciones técnicas y como precursor de la división del trabajo en la industria, concluyendo que “la historia del ejército muestra (…) la conexión entre las fuerzas productivas y las relaciones sociales”.

El historiador William McNeill, en su magnífica obra La búsqueda del poder, nos advierte que para estudiar “el macroparasitismo entre las poblaciones humanas” (que podría ser asimilado al imperialismo), deben estudiarse en especial “los cambios en los tipos de equipamiento empleados por los guerreros”.